"Los demonios nacían de la muerte de un inocente, su piel estaba hecha con la sangre derramada. Venían al mundo con un solo propósito: Proteger la parte del alma del difunto que seguía viva, en otras palabras, cuidar de sus descendientes." Zoram se ve obligado a ir en busca del demonio nacido del asesinato de su padre cuando Set, su mejor amigo, es sentenciado a muerte por un crimen que no cometió, pero para ello deberá entrar a un bosque del cual pocos han salido con vida. Tiene dos opciones: Arriesgar su vida en el bosque o dejar que su mejor amigo sea ejecutado.