Todas las noches en mis sueños, aparece una chica pálida, delgada, pelirroja, a veces sentada en una esquina de una biblioteca con un libro en las manos y su cabello ocultando su rostro, sentada en su escritorio con retazos de tela y una máquina de coser de espalda o patinando sobre hielo. Siempre que está a punto de mostrarme ese misterioso rostro me despierto. ¿Que pasa cuando Henry viaja y por primera vez le puede poner rostro a aquella chica que se adueña de sus sueños?