«— ¿Y crees que esto es fácil para mí?
— ¿Y para mí sí? Tengo que convivir con una auténtica desconocida, que no conozco de nada. Y encima tengo que soportar tus tonterías de niña pequeña.
— No son tonterías, Zayn. -Dije subiendo más el tono-. Además, ¿Y tú crees que yo querría estar aquí, en un callejón solitaria que apenas hay dos focos de luz, pérdida? Y lo peor, ¿contigo?
— Pues si tanto te molesta, ¿por qué sigues aquí? Si tanto me odias, vete. Y no creas que te lo voy a impedir.
—Porque tengo que cumplir con mI trabajo. -Dije con un tono de obviedad-. Y tranquilo, que ganas de irme no me faltan.
— ¡Pues ya te puedes ir, joder!
— No puedo dejarte aquí solo.
— ¿También forma parte de tu trabajo? -Dijo Zayn en torno burlón-.
— No.
— ¿Entonces?
— No me lo permitiría.»