Ella despidió a su amor
Él partió en un barco en el muelle de San Blas
Él juró que volvería
Y empapada en llanto ella juró que esperaría
Miles de lunas pasaron
Y siempre ella estaba en el muelle esperando
Muchas tardes se anidaron
Se anidaron en su pelo y en sus labios
Llevaba el mismo vestido
Y por si él volviera no se fuera a equivocar
Los cangrejos le mordían
Su ropaje, su tristeza y su ilusión
Y el tiempo se escurrió
Y sus ojos se le llenaron de amaneceres
Y del mar se enamoró
Y su cuerpo se enraizó
En el muelle
Sola, sola en el olvido
Sola, sola con su espíritu
Sola, sola con su amor en mar
Sola en el muelle de San Blas
Su cabello se blanqueó
Pero ningún barco a su amor le devolvía
Y en el pueblo le decían
Le decían la loca del muelle de San Blas
Y una tarde de abril
La intentaron trasladar al manicomio
Nadie la pudo arrancar
Y del mar nunca, jamás la separaron
Sola, sola en el olvido
Sola, sola con su espíritu
Sola, sola con su amor en mar
Sola en el muelle de San Blas
Sola, sola
Rin Itoshi está sumergido en la tristeza y soledad qué su hermano le dejó, sin alguien con quién compartir su dolor se sumerge en la agonía del poder, siendo un príncipe prisionero de su título real.
Conocerá el amor qué llegué a salvar a su agotado corazón, podrá superar todas aquellas malas situaciones si ese bello chico está junto a él.
No me dejes por favor, eres mi dueño y cautivador de mi corazón.