Hace milenios de años, cuando la tierra apenas comenzaba a dar pequeñas siembras y las casas comenzaban a construirse, se tomó la decisión de dividir el planeta en dos partes; el cielo y la tierra. En donde en el cielo vivían aquellas almas inocentes y en la tierra aquellos donde el pecado vive. Y en donde tal vez una misión sea suficiente para unir a dos almas por medio de un hilo rojo.All Rights Reserved