-¿Por qué tiendes a tener esa mente tan cerrada?- deja escapar un suspiro- Se que tienes ese pensamiento sobre que todos los alfas son iguales, si tan siquiera me dieras la oportunidad de demostrarte lo contrario...
-¿Oportunidad? Louis, tu sabes que yo no quiero un alfa, sabes muy bien que no creo en los lazos, en ningún futuro me veo con una mordida y también sabes que no creo en los "vivieron felices para siempre", sabes que en mi maldita familia hay una maldición sobre los alfas y estoy cien porciento seguro que no hay ninguno para mi.
Sí, claro que eso lastimó al Alfa, porque claro que él si piensa en las almas gemelas y ,desde pequeño siempre a tenido la ilusión de pasar su vida con un Omega y amarlo demasiado y ahora que pensaba que lo había encontrado pues el destino le dio una mala jugada ya que su Omega no creía lo mismo que él y vamos no lo podía obligar a algo que no quisiera.
- Harry sólo déjame cortejarte, déjame amarte, no te puedo obligar a que estés conmigo, sólo dame la oportunidad, sólo una, déjame mostrarte que no soy igual a los demás Alfas, yo te quiero Harry y quiero "romper esa maldición" y te des cuenta que el destino nos hizo encontrarnos y que está vez este alfa que te quiere no va a dejarte, sólo déjame intentarlo y si no resulta, entenderé y me alejare, sólo dame una oportunidad.