Había algo que me divertía en ver mis pies colgando de un séptimo piso y ver como el viento jugaba con mi pelo y se llevaba las cenizas de mi cigarro mentolado , tenia el impulso de saltar , todos los malditos días ese impulso de saltar era cada ves mas tentador e incluso pero no mas fuerte que mi valor porque ...¿ Que mas podía hacer ? estaba harta de que mis padres me recordaran todos los días que soy un estorbo para ellos y que no me parezco en nada a mi exitoso pero difunto hermano Zac , solo recuerdo la buena compañía de mis cigarros mentolados , los auriculares , mis letras y mi longboard . . . Creo que ese 1 de agosto , di todo por acabado hasta que conocí a Will y sus preciosos ojos color miel , cambiaron algo en mi , el me salvo .