Tenía casi todo resuelto, después de la perdida de mi madre todo absolutamente dejo de importar. No buscaba nada, no quería nada. Al menos eso pensaba hasta que la ví, por alguna razón me dió miedo. No me gustaba crear vínculos sentimentales con nadie por qué sabía que al final terminarían por irse. Pero con ella fue inevitable me saco del oyó para después hundirme y después volverme a salvar. Soy Maxwell Miller pero ustedes díganme Max odio mi nombre aunque en su dulce se escucha jodidamente. exitante.