Beth Cox es una dulce e inocente aspirante a actriz que luego de un casting es contratada para su primer papel de forma profesional, su mundo se sacude cuando comienza a descubrir lo oscura que es la industria del cine. Parece que nadie es inmune a las tentaciones de ese entorno, todos tienen una adicción, una debilidad y un secreto. No tarda en llegar a su vida Ian Hawk, director de la película en la que trabaja, la pone nerviosa como nadie lo había hecho, es un bombón de un metro noventa, rubio y arrebatador, que parece luz pero es pura oscuridad. Beth sabe que debe cuidarse de ese oscuro mundo pero la tentación crece con la llegada del encantador y dulce pelinegro inglés Ben Beckett.