Solum Deus

En mi mundo existen reinos que crecen sobre grandes montañas de oro, existen días sin noches pero con estrellas, muchas de ellas bajan a visitar las tierras sagradas. Existen animales tan pequeños como una partícula de polvo a tan grandes como un océano.
Nunca me cruce con uno, ni pretendo hacerlo.
Pero entre tantas cosas maravillosas existe algo más importante que la riqueza; el deseo.

Eso es más fuerte que cualquier otro sentimiento humano.
Porque en mi mundo el deseo te permite crear cosas, pedir cosas. Desde volverte fuerte y rico a revivir a un ser querido.
Pero entre todas esas cosas encantadoras los deseos pueden crear mal, oscuridad, codicia, odio.

Y también nos pueden crear a nosotros; los dioses.