Seth Ford; frío, calculador y terriblemente carismático. Adoptado por uno de los mayores criminales de la ciudad, se ganó el respeto de los bajos fondos a una temprana edad, inspirando tanto terror como admiración. Nadie se metía en su camino si quería conservar la cabeza.
Violet Grace; curiosa, aventurera y ambiciosa, a punto de cumplir su sueño, viajar a la gran ciudad a estudiar la carrera la cual llevaba deseando desde niña, periodismo.
Nadie le había advertido de los peligros de la ciudad, un mundo totalmente desconocido para ella, un mundo que inspira tanto miedo como atracción impulsada por la adrenalina de lo ilegal.
Una mezcla tan diferente que resulta perfecta.
¿Podríamos estar hablando de los modernos Bonnie & Clyde?