Un sueño, dos caminos y un destino, el cual, ya estaba escrito. Ella era como la noche, oscura, fría, distante. Era así hasta que el, el día, vino a darle luz, calor y seguridad en si misma. Ese día que conoció ella, brillaba, pero ella sabía que antes brillaba más, el día también necesitaba ayuda y ella ayuda le daría. Rachael y Max, tan diferentes, que parecían iguales.All Rights Reserved