No puedo recordar nada, sólo sensaciones me parecen tan vividas que pienso que son reales y que se porque están ahí, aunque en realidad no es así. Siento el viento en mi cara antes de un fuerte impacto, el calor de unas manos sujetando mis hombros, una fuerte punzada que amenaza con taladrar mi cerebro y por último un fuerte pitido que no me deja escuchar nada.