El gandioso Lan Xichen intenta lidiar con una problemática estudiantil. Desde hacía algunos meses el rendimiento de los alumnos en el instituto era pésimo y sabía que a los profesores no les interesaba realmente su salud ni nada más que no llevara la palabra "tarea" y el que cumplieran con sus deberes a tiempo. Los estudiantes se quejaban en los pasillos por las pocas horas de sueño y el estrés. Y todo eso podía verse reflejado en sus pésimas calificaciones finales. Sin embargo, como sólo podría esperarse del perfecto Lan Xichen y presidente del concejo estudiantil de su universidad, hace una propuesta a sus profesores y director que busca remediar aquello y promete resultados realmente buenos. Sin embargo, si eso no sucede, Lan Xichen tendrá muchos problemas con los cuales lidiar aún si su intención no había sido para nada mala. Su título del "presidente estudiantil" estaría en juego y no sólo eso, sino también el lugar en el concejo de su hermano WangJi. Del cual por cierto, necesita mucha ayuda para lograr sus objetivos. ¿Pero cómo podría Lan WangJi ayudarlo cuando su mente tranquila se había vuelto un desastre y la causa de ello era un chiquillo revoltoso un año mayor a él? Que para agregar, era un alumno que participaría en cada una de las actividades.