La marca aparece desde el día de tu nacimiento, es imborrable y está incompleta, a veces se presenta como una palabra a medias, otras un símbolo o un número y para algunos una frase. Pero lo más importante de ella, es que te une a tu alma gemela. Cuando dos personas destinadas se encuentran y llegan a tocarse, por mínimo que sea el contacto, ambas marcas se complementaran, su piel quemará como si fuese tallada a hierro ardiente y un lazo inquebrantable los unirá por siempre. Aunque el origen de esta sigue contándose como mitos o leyendas, la verdad incuestionable es que existe.