Mi mundo y el suyo. En mi mundo los demonios se disfrazan de Ángeles, y te hechizan con una sonrisa encantadora, hermosa. Caes en su juego mental muy fácilmente. Todo el mal que hacen es protegido por el espejismo del bien y la dulzura, cuando detrás de si mismo se puede ver con claridad la sombra de la maldad... danzando en el lago del pecado. En su mundo... En su mundo las sonrisas no existen, la maldad no se disfraza, la amabilidad es uno de los siete pecados. Matar es el pan de cada día y tu sangre es el vino con el que brindan sobre tu tumba, no te metas con ellos. No te metas con Aamon. No te metas con los Campbell. Su mundo es suyo y el único espejismo que existe el es que te lleva a mi mundo. En mi infancia hay amor, en la de el destrucción... En mi infancia creía en las hadas, él creía en los demonios. Aquí estamos.... En nuestros retorcidos mundos Luchando por el reino ganador.