¿Entonces qué, mis mompirris?, les comparto esta versión de mi vida que está masima, ¡pero masima es másima!, sin tanta toxicidad ni inmadurez, no, no, no, pura sabrosura y un amor así bien bonito. Aunque ojo, que también tuve mis problemibirilis por aquí. Pero el divino niño nunca me desamparó. Así, que a ver, a ver, mompirris, dándole al botón "Comienza a leer". Yo veré. Háganle pues.All Rights Reserved