Raquel siempre se sintió atraída por el mediano de los Hidalgo, Ares. Nunca se fijó en nadie más que no sea él, para ella era lo mejor que había visto y pensó que iba a ser así para siempre. Pero siempre hay un pero y, en este caso, es él... Artemis Hidalgo, el hermano mayor de Ares. Los dos son unos malditos Dioses, aunque son muy diferentes. Ares es un adolescente que disfruta de su sexualidad como lo hacen los chicos de las películas estadounidenses. Tiene su lado divertido, como también tiene el pervertido e hijo de puta. Ares Hidalgo es el chico deseado por todas, a pesar de ser la personificación de la palabra "fuckboy". Artemis es un joven de veintitrés años, aunque no hace lo que hace alguien de su edad. Se pasa el día trabajando, es más bien un adulto. A pesar de siempre lucir elegante, su aura es sombría... pero sensual. Es serio, poco hablador y si tiene que decir algo, lo dice tal cual lo piensa. Es cruel. Es un ser sin sentimientos. Pero joder... eso no quita que sea una maldita tentación andante. Eso a Raquel la confunde demasiado, la incita a meterse con lo prohibido, sobre todo cuando se da cuenta de que Artemis no es el único que la hace sentirse extraña.