Camara Instantánea

-¡Vamos Beatriz, esto es divertido!- Grito por encima de la música podía notar su sonrisa de oreja a oreja, yo sabía que mi cara era como si tuviera una fuerte indigestión.
-¡Trato de divertirme pero no lo logro! -grite, ella me sonrió, sujetando de mi cintura, sus ojos verdes se encontraron con los míos, cada que me miraba sentía que daban un pepto, detenía la falsa indigestión en mi estómago. Tal vez no sonó lindo pero así me sentía. Se acercó demaciado a mi para hablarme en la oreja.
-haré que te diviertas - su mano derecha sujeto mi nuca y así fue que nuestros labios se encontraron por primera vez, pero no la última.