Generalmente las historias más dulces comienzan con un "Erase una vez" o "En un reino lejano". Solo que esta historia no comenzó de esa manera, aquí no hay doncellas en apuros o príncipes que prometan cruzar los mares y montañas. Algunas veces los que fueron etiquetados como "villanos" tienen sus razones. El querer justificarse es normal. Hay leyes, que por más años que pasen seguirán teniendo peso sobre las vidas humanas, ahora deben cargar sobre sus hombros las consecuencias de sus actos. Sin imaginar que de por medio el titiritero estuvo moviendo los hilos, modificando los destinos, arrinconando hasta lo más profundo a quienes no se dieron cuenta que las sombras también deben ser vigiladas.All Rights Reserved