Tras el fallecimiento de su abuela, Dácil abandona su trabajo y sus sueños para consagrarse a la ganadería familiar en un intento de mejorar la precaria situación económica de los Lobera.
En las cordilleras norteñas los pueblos rebosan de prejuicios y rencillas que fermentan durante generaciones: rumores que giran en torno a los Lobera, aislados en un profundo valle rodeado por ancestrales bosques.
Tierras fronterizas entre la realidad y la superstición, que han sido testigos mudos de oscuros secretos y temores atávicos susurrados en la noche bajo la protección del hogar. Forestas en cuya espesura sólo se atreven a penetrar los Lobera, señores primigenios de esas tierras indómitas.
Acaso… ¿Temes a la niebla?