La isla de Printemps es una isla ambulante que, después de un largo recorrido, terminó en el Mar de Invierno, que como consecuencia, le llevó a la isla un interminable frío y una infinidad de copos de nieve. Este fue uno de los dos fenómenos que tomó por sorpresa a sus habitantes, nieve en una isla donde nunca ha nevado. El segundo fenómeno fueron las desapariciones de jóvenes que hasta el momento, aún no se han encontrado. No había ni un solo patrón, lo único que se ha sabido, es que cualquiera podría no regresar a casa. Y esto Harry nunca lo imaginó cuando lo vio alejarse entre la nieve, aquel chico que de pronto hizo enloquecer a su corazón... Louis.