«No soy un héroe sino un cazarrecompensas. Mi única intención es dejar este planeta con más créditos en mis bolsillos de los que tenía cuando llegué. Si no me crees, puedes acompañarme...»
Otra galaxia, otra época.
En su búsqueda por los legendarios jedi, el mandaloriano tendrá que atravesar una galaxia llena de princesas fugitivas, guerras, traición, perdida, romance, para poder completar su destino y sólo si la fuerza le acompaña, salvar a el futuro de la oscuridad.
En el caos del nacimiento de la Nueva República, lleno de codicia, piratas y reyes, ladrones y contrabandistas están un niño verde y su protector, un misterioso cazarrecompensas de Mandalore.
Corre el siglo XXVII. El hito en el desarrollo tecnológico ha hecho posible que la humanidad se expanda dentro de los límites del universo alcanzable. Los gobiernos de la Federación y las Colonias Independientes finalmente disfrutan de los frutos de una paz penosamente lograda después de años de conflicto.
En una lejana roca entre las estrellas, un anciano ve pasar con añoranza el fin de sus días. Los recuerdos de su pasado son todo lo que queda ya de una vida repleta de aventuras y desgracias, con el peso de sus errores como un enorme lastre que debe cargar sobre los hombros. Sabe en lo más profundo de su ser que nunca encontrará el descanso dentro del tormento hasta que sus pecados sean confesados.
Una niña será la elegida por el viejo para llevar sobre su juventud la carga de sus acciones. Atrapada en un mar de conspiraciones, traiciones y duda, la pequeña se embarcará en un relato que la llevará a través de los confines del espacio hasta mundos lejanos, sin saber que aquel trozo de roca que ella ha tenido la dicha de llamar hogar a lo largo de su corta vida es acechado por una amenaza en ciernes...