Agua y aceite se llevan mejor que Savannah Foster y Jared Hamilton que están sentados juntos en una boda e inmediatamente sienten un apasionado disgusto el uno por el otro. Savannah es una mujer sarcástica e inteligente con una tendencia a gastar todo el dinero, mientras que Jared es un apuesto mujeriego de vida marginal y un mal apostador que puede sobrevivir más del encanto que provoca en las mujeres que de cualquier otra cosa. Llegan a la conclusión que contraer matrimonio es una excelente opción para conseguir dinero y buenos regalos, por lo que deciden organizar una boda ficticia, sin imaginar las consecuencias. Entre ellas, encontrar la verdadera pasión y amor entre los dos.