lo triste de todo es que ella cayó en la rutina de estar con él,aun sin tenerlo,de verlo,de quererlo,de tener que compartirlo yde amarlo en secreto,por que todo era "placer carnal" como ella valientemente se atrevía a clasificar tratando de ignorar que su corazón se aceleraba cuando sentía el de él junto a si cuerpo palpitar.verse juntos tumbados en la cama,ver como con su mano él su cuerpo tocaba,saber que él con todas hacia la mismo le molestaba,pero quedarse en silencio era lo unico que le quedaba,pobre almaenamorada,llegó a rezar paraque supena deamor terminará,pero má lo veía ymás se encariñaba,ypoco apoco tras cada suspiro,máslo añoraba,divagaba y soñabaque élsería sucaballero,su príncipe de ensueño,que llegaría en sucorcel blanco asalvarla de ese desasociego,pero despertaba,volvía a larealidad de que élsolo quería su cuerpo nada más,elcuerpo de ella yel de todas las demás,yasí fue como ella para élse convirtió en un # más de lalista queel apodaba las buenas para comer y desechar