Anya: En la profundidad del bosque

Anya pensó que su vida terminaría al ver sufrir a su madre en sus ultimos momentos de vida, dejándola frente a tantos peligros a su alrededor. De no ser por su hermana recien nacida, ni siquiera se hubiera pensado en la posibilidad de seguir adelante, de superar la muerte y luchar por la vida de ella y de la pequeña criatura.
Ella sabía que su hermana no necesitaba una holgazana o inútil, sino una fuerte, viva y activa mujer que despertara y trabajara arduamente para luchar por el mañana.