Fran era tan orgulloso, que dejarse seducir o si quiera la idea de que un alfa lo sometiera era estúpida. Para él la palabra "sumisión" no existía. Incluso en un mundo regido por los tipos sociales no se dejaba doblegar. Pero una noche, ocurrió su peor pesadilla; había dejado los supresores en casa y su celo estaba empezando. La única opción para salvarse era buscar un alfa fuerte que intimidara al resto. Su amigo; Ram, era ideal.All Rights Reserved