La profecía decía: el día que las almas del tigre y el dragón se vuelvan a juntar, será porque la humanidad estará en grave peligro, y solo ellos dos serán capaces de enfrentarse al mayor enemigo conocido por las personas y las deidades: el amo absoluto de los demonios.
Cuando Mei Lin, la única diosa marcial, envía a Shuang al mundo mortal para recoger el alma de un niño, acaba descubriendo que no puede volver. El joven y caótico dios, en su desesperación, decide ayudar a Xue Zhihao, el hermano mayor del niño moribundo con una condición: cuando lo acabe de curar, le ayudará a volver. Xue Zhihao, un maestro del cultivo despreciado y temido por muchos, acepta, y lo lleva a su clan, Xin Yi, convirtiéndose así en el joven maestro Lin.
Con el tiempo, Shuang comprende que las casualidades no existen, que su misma existencia es un peligro para la gente cercana a él y que nadie jamás será como aparenta.
Y todo esto mientras se acerca una de las mayores guerras a las que se han enfrentado la humanidad y los demonios.
Mientras los secretos más oscuros de la Casa Blanca emergen, Jennifer y Barron se encuentran atrapados en una red de poder, mentiras y traiciones. Él debe decidir si seguirá siendo el hijo obediente o se convertirá en la voz que su país necesita. Ella deberá aprender a sobrevivir en un mundo donde la verdad es la mayor amenaza.
En un escenario donde el amor y la justicia parecen imposibles, dos almas opuestas luchan por ser libres, aunque eso signifique enfrentar al mismísimo presidente.
Cuando el poder y el corazón entran en conflicto, ¿qué estarán dispuestos a sacrificar para encontrar su propia verdad?