Luke es el nuevo chico en la ciudad, y nunca se ha sentido más solo. Con toda su ropa que no combina, loco cabello rubio y caótica vida familiar, no podría destacar más incluso si lo intentara. Entonces se sienta en el autobús al lado de Ashton. Silencioso, cuidadoso, y, a los ojos de Luke, imposiblemente genial, Ashton ha descubierto que pasar bajo el radar es la mejor forma de salir adelante. Lentamente, de manera constante, a través de conversaciones nocturnas y una pila de cassettes mezclados cada vez más grande, Luke y Ashton se enamoran. Se enamoran de la forma en que lo haces la primera vez, cuando tienes 16, y tienes nada y todo que perder…