Muros, tan fáciles de construir y tan difíciles de quebrantar. Puestos en su lugar evitan que algo pueda atravesar.
Aíslan, alejan, retienen.
Edan ha construido muros inquebrantables a su alrededor para que nadie sea capaz de acercarse más de lo que él quiere. Vive sumido en su mundo, sin importarle nada ni nadie más a su alrededor y es algo que con solo verlo cualquiera notaria. Pero, nadie es quién es sin que las circunstancias lo moldeen.
Cuando Edan llega a Bricht, los acercamientos no paran entre él y Camile, una chica dulce y gentil que irá sacando poco a poco su verdadero ser gracias a Edan. Aunque para ella sea molesto su comportamiento frío, inexpresivo y poco importa, eso es justo lo que la atraerá sin darse cuenta haciéndola sacar su lado atrevido y llevándola al límite.
Fuego, atrevimiento, deseo, secretos y problemas es lo que se les avecina.
¿Las casualidades existen?
Eso está por verse.
Ambos llegan a la vida del otro para cambiarlo todo...
Una autocaravana era la solución para sobrevivir durante una semana, ¿pero y luego..? ¿Cuál era el plan? ¿Volver a Londres y vivir del cuento? ¿O simplemente dejarme llevar por lo que me rodea, con el chico que viaja por el mundo?