El repentino mensaje lo cambió todo. Ahora debo de mudarme por tiempo indefinido a Canadá, con el propósito de esconderme de aquel individuo. Pero aquello se verá complicado al conocer a los jugadores del equipo de hockey de "Frigus Crows", específicamente al conocer a Alexander Müller. Alexander... Aquel al único al que hice una excepción, creyéndole cuando me prometió que iba a hacerme feliz. Quien diría que hizo lo imposible para cumplir con su promesa. Al final de cuentas, Canadá y todo lo que ofrece, puede ser acogedor.