Harry admira a Regulus. Tiene un humor increíble, es talentoso, buen deportista, joven, atractivo y prácticamente todo lo que cualquier adolescente quisiera ser. Le encanta llegar junto a él, conversar y escuchar historias geniales de su parte, así que cuando Regulus le aparta y se aleja como si su presencia molestara Harry solo puede preguntarse qué hizo mal. En su búsqueda descubre que tal vez no solo admiraba al hombre.