París, Francia, 6 de junio de 1832. Tras el fracaso de la insurrección popular en las barricadas, ante un pelotón de fusilamiento dispuesto a acabar con su vida, Enjolras enfrenta la muerte con dignidad, sabiendo que los Amis de l'ABC han luchado hasta el final y que nada, sin importar la opresión hacia el pueblo, podrá evitar la llegada del porvenir justo y libre que desean. Pero en ese momento pasa algo que no esperaba: Grantaire, el cínico, el borracho, el escéptico, se une a él frente a los fusiles defendiendo a gritos la República, dispuesto a morir a su lado. Cuando sus manos se encuentran, Enjolras siente que, efectivamente, aún no ha muerto la esperanza. Los fusiles disparan y las balas perforan sus cuerpos, arrebatándoles la vida... ¿o tal vez no? "Utopía hoy, carne y hueso del mañana". La música del pueblo no se deja someter, a pesar de lo pasado, mientras el futuro que anhelan sus corazones espera para nacer, su luz asomando en el horizonte como la aurora de un nuevo día.