A ella le encantaba vivir, hasta que descubrió que sin sus atardeceres, libros, pinturas y colores, le daba igual si a sus pulmones les llegaba oxígeno, o no.
Sign up to add Su último atardecer to your library and receive updates
or
A ella le encantaba vivir, hasta que descubrió que sin sus atardeceres, libros, pinturas y colores, le daba igual si a sus pulmones les llegaba oxígeno, o no.