Todo transcurría de manera tranquila en las vidas de Alex y Declan; hasta que el mensaje que menos esperaban volver a ver... llego, arruinando por completo su intento de una vida nueva.
"¿En serio creyeron que se desharían de mi tan fácil?... que ingenuos como siempre; jamás podrán librarse de mí, los advertí..."
Un mensaje que cambiaría sus vidas por completo... otra vez... aunque esta vez no solo a ellos...
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Anthony, es el clásico estudiante que tiene buenas notas, pero es de los más populares de la clase, no es el típico nerd que se la pasa en la biblioteca o haciendo tareas todo el día; la mayoría lo admira porque sabe organizar demasiado bien su vida escolar de su vida social... tendrá que empezar a olvidarse de esa popularidad, después de perder a un amigo.
Camilla, una chica carismática y de pocos amigos, muy reservada pero amigable, enamorada de Anthony desde que iniciaron el bachillerato, y alguien se verá envuelta en una red de acertijos y muertes al igual que le sucedió a Declan y Alex.
Félix, mejor amigo de Camilla desde secundaria, hijo único, que perderá a alguien muy importante en su vida por culpa de Miller, pero a veces nada es lo que parece...
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Tres estudiantes de una preparatoria cercana a la universidad reciben un mensaje, que cambiara sus vidas por completo... al parecer esta historia ya había sido contada... ahora tendrán que atrapar a Ethan Miller con la ayuda de Alex y Declan, en un lugar completamente nuevo y con una dinámica totalmente diferente.
¿Están listos para el nivel 2? Que comience el juego...
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Nota: Se recomienda leer la primera parte de este libro "Te atreves a jugar" que puedes encontrar en mi perfil.
Todos los derechos reservados. Historia original. No al plagio.
Portada elaborada por: @ddemxnio en instagram :)
Hay reglas en el mundo que debes cumplir. El deber de servir y complacer, dar y recibir.
Soy Stella Miller, una mujer firme y con decisiones. Nadie puede sobrepasarse conmigo si no quieren morir en garras de él.
Mí amado esposo, el hombre fuerte y delicioso que siempre está a mis pies, al único que me pondría de rodillas y al único que acariciaria de manera perversa y coqueta...
Y mucho cuidado con las cosas que dicen de mí, porque soy una chica. Más conocida como la mujer del Diablo.