El club de lectura comienza terminando las clases, y Amity se ha resignado a ir, eso es porque de verdad le gustan los libros no porque la presidenta del club le agrade, de hecho, Luz es molesta, o eso es lo que Amity piensa de la otaku de la clase B. Por otro lado, Luz está feliz de que alguien se haya unido a su solitario rincón de lectura. Una historia de su día a día aprendiendo a conocerse.