Dicen que las familias felices se parecen, pero los Uribe están lejos de ser una familia feliz y menos aún en parecerse a otra.
El jefe del clan los ha manipulado a su antojo desde hace años sin que se dieran cuenta, le preocupaba su futuro y el de los negocios, para permanecer en la cima, necesitaba un sucesor, alguien que tenga, todo lo que sus hijos no tenían, y lo logro.
Alelí Reyes Alcázar era la perfección absoluta: bonita, inteligente, culta, decidida. Pero ¿ estaría ella de acuerdo en seguir esa vida? , y si no aceptaba ¿Quién mas podría serlo?.