Pronto Dios sintió que algo muy grande y poderoso lo amenazaba. Tranquilo, se levantó de su silla de mármol y miro hacia el horizonte del cielo azul profundo. No vio nada. Camino hasta las escalinatas y volvió a mirar, analizando el mismo aire quieto que le provocaba que su piel se arrugara. Vio a lo lejos un grupo, como un ejército entero de seres negros e inmundos volaban hacia el, Lyanna iba al frente, con sus poderosas alas de murciélago, le sonrió al Creador. Este dió un paso hacia atrás, llamo a Miguel pero este no respondió a las campanas. Cuando volvió a tirar de la cuerda de la campaña está cayó sobre su peso, Lyanna piso por fin el suelo del Trono Divino. Camino lentamente arrastrando sus alas, miro al Creador esperando a que la viera.
- Ya estoy aquí, tu profecía.
Dios volteo a verla, pronto apareció Miguel y Rafael a lado de él y lanzaron las espadas celestiales a la amenaza, pero está las derribo con un débil gesto con la mano, pronto esas espadas quedaron pulverizadas. Miguel salto sobre la escuálida joven con ojos ámbar y la quiso derribar, un demonio lo termino por tirar hacia las nubes. Rafael hizo lo mismo y esta vez Mammon lo hizo caer sobre sus rodillas con un fuerte golpe en la aureola, lo dejo inconsciente.
Lyanna camino hasta Dios y sonrió otra vez.
- Tu profecía se cumplirá, y seré dueña de todos los vestigios de tu Creación, no podrás detenerme.
Sobrevivió a la muerte pero el verdadero peligro acaba de comenzar.
Todos en el reino enemigo deseaban verla muerta, su desaparición significaba el fin de una era... o eso creían.
En lugar de morir, fue enviada al distrito de jinetes, un lugar donde el peligro acecha en cada rincón, y donde su verdadera identidad debe permanecer oculta a toda costa.
Pero no está sola.
Entre traiciones, criaturas indomables y un destino que se cierne sobre ella se encuentra Rigel Heisenbergs: el jinete más letal del distrito.
Su misión es protegerla, pero su mayor deseo es verla destruida.
Cada mirada entre ellos es una batalla silenciosa. y cada paso que da la acerca más a una guerra que podría consumirlo todo.
Un beso, una profecía y una traición que cambiará el curso de la historia.