El chico que siempre vio junto a su casillero ha desaparecido y lo único que ha dejado tras de su misteriosa desaparición es una simple nota escrita sobre una servilleta. Ella sabe adónde ha ido o cree saberlo, pero no pondrá su atención en ello hasta que la siguiente pista del desaparecido salga a la luz. Ser culpada de un asesinato no es la mejor cosa que le pudo pasar, así que se marcha con la policía tras ella y una idea única en la mente: 'lo voy a encontrar'.