Story cover for Red Connection • Soukoku • Finalizada by minichuuy
Red Connection • Soukoku • Finalizada
  • WpView
    Reads 411,604
  • WpVote
    Votes 38,461
  • WpPart
    Parts 32
  • WpView
    Reads 411,604
  • WpVote
    Votes 38,461
  • WpPart
    Parts 32
Complete, First published Jul 04, 2021
Mature
Desde niño a Nakahara Chuuya se le habló sobre la importancia del brillante hilo rojo que estaba atado a su dedo meñique. 

"Ese hilo te ata a una persona muy especial. Y para encontrarla, no puedes cortarlo", "te amará tanto como nosotros a ti", le había dicho su padre. 

Tras esperar durante años la llegada de esa persona tan especial, Chuuya finalmente se encuentra a quien está atado al otro extremo de su hilo rojo. Sin embargo, dicha persona... ¿no es su alma gemela?
All Rights Reserved
Sign up to add Red Connection • Soukoku • Finalizada to your library and receive updates
or
Content Guidelines
You may also like
You may also like
Slide 1 of 10
¡Amame a mí, chico tonto!  cover
Mi Verdadero Amor cover
My everything [Edmund Pevensie] cover
HILO ROJO - JJK cover
• Saltando Pasos [Soukoku] • cover
Al filo del Amor cover
La guía de cómo encontrar un padre ausente | Soukoku  cover
El hilo roto cover
𝕂𝕚𝕤𝕤 [Soukoku] ~Completa~ Chuuya×Dazai cover
¡Él NO es mi novio! - Soukoku [FINALIZADA]  cover

¡Amame a mí, chico tonto!

19 parts Ongoing

Chuuya no sabe cómo fue que terminó perdiendo dos años de su adolescencia con Dazai, finalmente había pasado la etapa del enamoramiento y podía entender a que se referían sus amigos con "Lo guapo no le quita lo idiota"... Por supuesto, tuvieron momentos buenos, hasta que le llegaron varias fotos del engaño del castaño con una muchachita de un grado menor. No hubo escándalo, no hubo drama. ¡Pero por el amor de Dios! Quería arrancarselo del pecho, demostrarle que él era mejor, que nunca encontraría a alguien similar. Que fue Osamu quien perdió. Así que, como consecuencia de una de sus tantas borracheras se animo a arrebatarle toda oportunidad de salir con el chico nuevo. Sabotearlos, eso era todo, no robarlo directamente, no engancharse... mucho menos enamorarse, ¡Eran polos opuestos! Entre el fastidio que se causaban mutuamente, el bicolor y Chuuya, realmente eran capaces de dar la vida por el otro. Él juraba que no había nada, que nunca podría amarlo, pero en cuanto lo probó... Que maravilla del infierno eran los labios de Sigma.