Cuando te dedicas a la investigación de crímenes y hacer valer las leyes de la justicia, puedes encontrar un sinfín de tétricas historias de asesinatos, secuestros, violaciones, en fin, toda miseria humana alentada por la mano oscura del alma. Sin embargo, hay ocasiones en las que el sentido común puede traicionarnos, lo que me recuerda ir al segundo punto en cuestión. De entre todas las investigación que realice durante mi juventud, la del caso Belle en ahora la desolada reserva de Cazadero, ha sido sin duda el más sobresaliente. ¿Por qué? te preguntaras intrépido lector, pues veras, los eventos que a continuación narrare sigo sin tenerles una verdadera explicación. Siempre he pensado en ello como un mal recuerdo de un tétrico sueño que tuve una noche de verano. Mi pesadilla en una noche de verano.