¿Será acaso el destino jugando en nuestra contra?... ¿En serio uno de los menores tropiezos e inconvenientes puede desatar una tragedia? El mundo da demasiadas vueltas y en ocasiones en la vida diaria ocurren situaciones, pequeños retos, a veces es para superarnos de una buena manera, pero también en momentos pueden darnos una valiosa lección a través de una experiencia de lo más fatal y que deseamos que no hubiera pasado en ningún momento.