La dura verdad para los humanos es que nos volvimos parasitos para nuestro planeta, pero no cualquier tipo de parasitos, sino unos que amenazan la existencia de los verdaderos dueños de este mundo. Monstruos. Lamentablemente estos estan poco contentos con nuestra estadia y no se irán sin pelear, al igual que nosotros. La duda para nuestra raza ahora es: ¿Lograremos sobrevivir?