La telaraña de la orquídea

¿Cómo es vivir aquí?
Pues eso depende de la hora.
𖠁De día, todo es alegre y lleno de energía gracias a todos quienes pasean por aquí.
𖠁En la tarde, el aire es fresco debido a la altura. La vista de la ciudad al atardecer desde el faro es perfecta para una declaración. Y si te rechazan, bueno... ya estás en el faro, ¿no?
𖠁Cuando salen las estrellas el entorno es solitario. Tranquilo y callado, a excepción de los maullidos de las mascotas.
Hasta que aquella sombra apareció.
Llegó con las aguas del río Guayas, dejó tristeza y sufrimiento a cambio de una vida, yéndose finalmente con el aliento de junio.

La culpa es el sentimiento más pesado de cargar. Como un parásito se adhiere a tu cerebro y es capaz de alcanzar tu corazón para provocar un malestar continuo. Pero aunque suene irónico, también es un paso hacia la valentía. Después de todo, nadie declara en voz alta que mató a alguien... Ni mucho menos busca justicia para un desconocido por vía propia.

Jean lo sabía. Era víctima de este parásito. Y para extirparlo decide buscar al asesino de un hombre del que apenas había oído hablar, pero que no dudó en protegerla. Sin querer, termina trepando el tallo de una enorme orquídea cuyas raíces fueron regadas por el amor, la venganza y el rencor años atrás.