Sabía que debería haber esperado hasta que pasara la tormenta para salir de mi refugio. Pero claro, mi madre siempre me decía que era demasiado terca y atrevida por mi propio bien. Así que aquí estoy, de rodillas, rodeado por un montón de simios con lanzas, mientras mi tocayo se derrama a mi alrededor. Mi nombre es Raine. Y esta es la historia de cómo conocí ... al Rey Mono. César