Es 1940 y la guerra está en pleno apogeo. Kurapika Kurta, un distinguido espía de la División de Inteligencia de la Alianza Occidental, debe infiltrarse en las bases enemigas para sabotear el plan de ataque nuclear del príncipe Tserriednich. Cuando Kurapika se infiltró en la base militar enemiga disfrazado como enfermera, el jefe de Estado, Chrollo Lucilfer, descubrió su secreto... pero le ofreció un trato descarado a cambio de su silencio.