Expectativa. Es lo que todos tienen acerca de la vida en especial los adolescentes, pero que pasa si te digo que toda mi vida se resume en eso... no por mi parte, por parte del mundo que me rodea. Cuando era más pequeña, la gente parecía no fijarse en mí o en cualquier cosa que yo hiciera, hasta que crecí. Las personas parecían creer que yo era un tipo de persona capaz de hacer cualquier cosa, buenas calificaciones, buena amiga y persona, buena en absolutamente todo pero internamente sabía que también esperaban que fallase, como todos los que tiene éxito en algún punto. En cambio, yo siempre me sentía la CASI; me refiero a que CASI saco diez en alguna materia, CASI me eligen, CASI tengo novio, CASI soy yo. Ese sentimiento no era para nada de mi agrado, me asustaba pensar que había personas esperando demasiado de mi cuando en realidad yo era más ordinaria que nadie, podías fácil encontrar cinco yo en cada escuela y te aseguro que todas ellas se sentían especiales como yo me había sentido en algún punto de mi vida. Pero qué pasa si, al final si soy la expectativa.