Chifuyu Matsuno y Keisuke Baji han sido separados. Por circunstancias de la vida, uno de ellos ha terminado muerto y el otro ha tenido que seguir, arrastrando la culpa y el remordimiento, sin poder olvidar lo que sucedió ese fatídico día. Sin embargo, la vida les ha dado otra oportunidad al permitirles renacer en la misma línea temporal.