Como jóvenes hicimos tantas cosas que muchos consideraron estúpidas, falsas y nada duraderas, una de ellas fue enamorarnos. El amor en la adolescencia es falso, interesado y una pérdida de tiempo, es lo que me dijeron tantas veces que tal vez lo creí unas cuantas, hasta que lo conocí y supe que las cosas no eran así, y esos "nunca llegarán a nada" no tuvieron sentido cuando me sonreía con el verde de sus ojos destellando. He oído y leído una gran cantidad de veces que la gente describe el amor como tener "el cielo en el infierno", entiendo que es como un poco de felicidad en su mundo, como flotar en nubes en medio del dolor, como si no pudiera alcanzarte. Pero en mi caso, yo tenía mi infierno en el cielo, porque nuestras acciones nos habían enviado a lugares opuestos, y aún cuando yo estaba en el deseado paraíso, no se comparaba con estar junto a él.