En medio de todo el caos que conlleva ser una de las grandes promesas de Hollywood, se tiene asegurado veinte cámaras al día en busca de cualquier fotografía, para Ginebra Santiesteban representa lanzar los dados ya que en ocasiones puede hacer algo positivo con su fama, pero un poco de glamour hollywoodense bastan para cuestionárselo todo. Mientras que, en el mundo del automovilismo el nombre de Lando Norris representa velocidad y futuro, el joven piloto de McLaren está deseoso de poseer lo antes posible el titulo de campeón mundial y para eso necesita dar cada gota de energía. A veces se encuentran las cosas cuando ni siquiera se estaban buscando y bien dicen que el amor no llama a la puerta dos veces, pero para estas dos estrellas de mundos diferentes seguir su corazón podría representar ir en contracorriente de lo que la gente espera de ellos.
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